
Se lo puede encontrar en la iglesia, bajo el altar, cerca del cura de la parroquia que distribuye la comunión entre los fieles.
Ahora Ciccio acude a misa en la iglesia donde solía acompañar a María, y donde según los fieles "espera a reunirse con ella".
La historia de Ciccio recuerda a aquella contada por la famosa película protagonizada por Richard Gere, Hachiko. Un perro y su dueño, un vínculo que no se rompe, incluso después de la muerte.
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