viernes, 22 de febrero de 2013

EL SENADO APROBÓ EL ACUERDO CON IRÁN


El kirchnerismo lo impuso por sólo ocho votos de diferencia. La oposición denunció que, una vez que se transforme en ley el pacto, Irán podrá liberarse de los pedidos de captura que libró Interpol sobre los acusados. La votación fue la más ajustada desde el año 2010.-
El Senado dio media sanción al proyecto por el cual se ratifica el memorando de entendimiento que la Argentina firmó con Irán en torno a la investigación del atentado terrorista a la AMIA, ocurrido en julio de 1994, que dejó 85 muertos. El kirchnerismo logró imponer su mayoría por sólo 8 votos. Consiguió 39 sufragios contra 31 de la oposición y dos ausentes. 
La maratónica sesión comenzó con el discurso del oficialista Daniel Filmus, quien defendió el memorando “para que no pase lo que pasó con la investigación de la Embajada de Israel”. Según Filmus, es necesario que la Argentina corra el riesgo de pactar con Irán para poder llegar a la verdad. El senador K negó que haya elementos en el memorando que puedan hacer retroceder la causa que instruyó el fiscal especial Alberto Nisman y por la que están sindicados como culpables 8 iraníes, de los cuales 5 tienen pedido de captura internacional de Interpol. El porteño aventuró que en caso de que Irán impida que sus ciudadanos acusados sean interrogados por la justicia argentina, “quedará en evidencia quiénes son los responsables y tendremos todo el respaldo internacional”. 

Credenciales rojas. La oposición introdujo ayer en el debate la denuncia de que el verdadero interés del gobierno iraní es que los cinco pedidos de captura que libró Interpol, que alcanza a dos candidatos presidenciales del régimen islámico, queden sin efecto.
El primero en hacerlo fue el radical mendocino Ernesto Sanz, quien tuvo una alocución celebrada por toda la oposición. “No es cierto que estos pedidos los puede desactivar solo el juez de la causa”, dijo. Explicó que Interpol puede interpretar de oficio que, en virtud del acuerdo votado ayer, expiran los motivos que dieron lugar a las circulares rojas sobre los cinco iraníes. “Esto es lo único que persigue Irán”, dijo Sanz con vehemencia.
Quien tomó la posta luego fue la peronista disidente Sonia Escudero. La salteña leyó un cable de la agencia de noticias estatal de Irán, en el cual un jurista de ese país analizó el memorando. Escudero leyó párrafos donde el especialista persa afirma que “el Gobierno argentino no está seguro de la veracidad de la investigación” y que si la Comisión de la Verdad que se crea en el tratado lo indicara, “la investigación se cae” y que “el propósito es que los dos países informen a Interpol que la cooperación anula los pedidos de captura”.
El chubutense Mario Cimadevilla (UCR) añadió que el artículo cuarto del tratado obliga a las partes a aceptar las recomendaciones que haga la Comisión de la Verdad. “Las partes son los Estados, es decir a los tres poderes del Estado, por eso se interfiere en la justicia argentina”, dijo. En tanto, el socialista Rubén Giustiniani insistió en una de las posturas de la oposición más unánimes: que el tratado es inconstitucional porque implica interferir en el poder judicial argentino. 

Voto oficialista. Aníbal Fernández salió a refutar las afirmaciones opositoras. “Les reclamo prudencia a la hora de expresarse. Están queriendo quedarse con el beneplácito de la sociedad porque hay una parte que no está de acuerdo. Es pura picardía. El debate es pobre, todos los argumentos son pobres”, aseguró.
El titular del bloque K, Miguel Pichetto, cerró el debate y pidió la votación, que fue la más ajustada desde el año 2010.
Rechazo cordobés 
Los tres senadores, en contra. 
Luis Juez (FAP). Se preguntó por qué el Gobierno “que nos entusiasmó con las banderas de la verdad, la justicia y los derechos humanos borra con el codo lo que escribió con la mano”. “No nos engañemos. Es como si le hubiéramos dicho a Videla que integre la Conadep”.
Norma Morandini (FAP). Dijo hablar “desde el dolor”. “Luego de 30 años de democracia el Estado repite la matriz del Estado terrorista y encubre, como los dictadores escondían los muertos desapareciéndolos”.
Marta Borello (UCR). “Es prácticamente imposible que se avance sobre la verdad y la justicia, todo lo contrario, nos ponemos al borde de la impunidad”.

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