EX MEDICO FORENSE RENE JEREZ |
El juez de control Omar Archilla resolvió recientemente confirmar la acusación contra Herrero, el forense y los hijos de Galván por falso testimonio y falsedad ideológica.
Durante el Juicio a Aníbal Galván en el año 2009, acusado y condenado por matar a su concubina Andrea Romero (22) y la pequeña hija de ésta, Celeste Romero, de tan solo 5 meses, el forense Bernardo Jerez desató la polémica en los Tribunales de Villa Dolores.
El perito se quebró y confesó que había cambiado su informe sobre la causa de muerte de Andrea y Celeste por “orden” del por entonces fiscal del caso, Julio Herrero.
Según el testimonio del forense Jerez, el exfiscal Herrero habría concurrido a su despacho el 29 de noviembre de 2001 pidiendo que ampliara su informe acerca del caso Galván y que concluyera que los traumatismos sufridos por las víctimas se debían a un accidente de tránsito, para “cerrar el caso”. El apuntado por Jerez, el por entonces fiscal Herrero, niega esa acusación.
En el primer informe, el forense explicó que los hematomas de Andrea poseían “un color negro originado por la hemoglobina de los glóbulos rojos” y, según Jerez, “fueron realizados en vida”. “De acuerdo a mi experiencia personal, (esos moretones) no serían originados por un accidente de tránsito, sino por politraumatismo, y por un elemento posible productor, duro y romo”, dijo el perito.
El segundo informe contradictoriamente concluyó que los traumatismos en el cráneo, tanto de la mujer como en la hija, habían sido provocados por un accidente.
El fiscal Herrero había imputado a Galván de homicidio simple, pero tiempo después cambió la imputación a homicidio culposo, figura que se aplica en ocasión de un accidente de tránsito. Entonces, otorgó la libertad a Galván y dio por cerrado el caso.
El caso. El 12 de noviembre del año 2001 Aníbal Galván, su pareja, Andrea Romero, y Celeste Romero salieron a las 3 de la casa de una sobrina de Galván a bordo de un Renault 12.
Cuando viajaban por la ruta E-91, en Los Cerrillos, Galván frenó el auto, bajaron y empezaron a discutir. Galván le dio un fuerte golpe en la cabeza a Andrea y le provocó la muerte. La subió al auto, puso a Celeste en la falda de su madre muerta y condujo el auto hasta un cañadón donde lo arrojó provocándole la muerte a la bebé. Después sacó a la mujer y a su hija y las tiró a un embalse próximo, a 200 metros del lugar del “supuesto accidente”. Los cadáveres de la mujer y la beba fueron encontrados tres días después.
En el 2004, luego de que Herrero se jubilara, el fiscal Emilio Andruet reabrió la investigación y dispuso la detención de Galván, quien fue imputado finalmente por los delitos de “homicidio simple y homicidio calificado por el vínculo”, elevando la causa a juicio que condenó al acusado a prisión perpetua en el año 2009.
Fuente: VDX ONLINE
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