GASTON TURUS |
Gastón Turus al final pudo denunciar penalmente lo que le sucedió el viernes. Belgrano y la Liga Cordobesa pedirán esta noche en AFA que en Santa Fe no se juegue más con público visitante.
Movido fue el día de Belgrano, más precisamente de Gastón Turus en la jornada de ayer. Luego de los hechos que son de público conocimiento, pudo concurrir al edificio de Tribunales II, Distrito 2, Turno 3 de Pablo Caballero para denunciar el maltrato del que fue objeto por parte del accionar policial. Cabe recordar que en Rosario, se negaron a tomarle la denuncia por encontrarse imputado de “lesiones leves” junto a sus compañeros Luciano Lollo y Juan Quiroga.Unas dos horas bastaron para que Turus lograse el cometido, con pruebas de video incluidas, que a través de un exhorto llegó a la Fiscalía Nº 8 de Rosario del Juzgado Correccional Nº 3 a cargo de Enrique Paz.
El defensor, aún con la cicatriz del “palazo” que recibió en el pómulo, dijo: “Yo estoy muy tranquilo porque no hice nada. Fui a tratar de parar la represalia y recibí un palazo. Por orden del abogado del club hice la denuncia y una revisación solicitada por el juez”. Sobre cómo vivió estos días, destacó: “Recibí el apoyo de mis seres queridos, amigos, compañeros y colegas y deseo fervientemente que esto se solucione, que se pueda ir tranquilo a las canchas aunque ahora en Rosario hay que pensarlo dos veces. Ojo, no es miedo, es precaución”.
La denuncia de Turus será tomada como propia por el presidente Armando Pérez, quien esta noche acudirá al Comité Ejecutivo de AFA para pedir, entre otras cosas, no jugar más en Santa Fe hasta que las garantías estén dadas.
Esta mañana, Belgrano realizará una ampliación de la denuncia de Turus hacia el maltrato policial.
Falso obispo se burla de la seguridad del Vaticano
Un hombre disfrazado de obispo (en la foto, primero a la izquierda) logró introducirse en el Vaticano en la jornada de apertura de las reuniones de cardenales para organizar el cónclave en el que se elegirá al futuro Papa, burlando brevemente la seguridad de la Santa Sede, informaron medios italianos.
El falso obispo llevaba traje y objetos similares a los de los purpurados: una cruz de bijouterie, una bufanda violeta en lugar de la faja roja y un hábito talar negro algo corto, informó la agencia Ansa. Así vestido, pasó el primer filtro de Guardias Suizos y entró en el Vaticano hasta la plaza frente al Aula Paolo VI, mezclándose con más de cien cardenales llegados a la primera de las reuniones para organizar el cónclave. Tras ser descubierto, el «falso» obispo fue llevado fuera de la Santa Sede, entre las risas de los periodistas y operadores de televisión presentes.
Más tarde, durante la reunión diaria con los periodistas, el jefe de la sala de prensa del vaticano, padre Federico Lombardi, enfrentó preguntas sobre el caso.
«Yo estaba dentro del Aula donde se desarrollaba la Congregación
-respondió, con un toque de humor-. No vi falso obispo alguno ni falsos sacerdotes. Creo que dentro todos eran cardenales de verdad», ironizó.
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